💫Cuando algo bonito también te inquieta

Anoche me sentía tranquila. Dormí mis horas, pero amanecí con el corazón inquieto, como si algo dentro de mí no hubiera descansado. Había estado hablando con alguien que me gusta… y, sin darme cuenta, esa mezcla de emoción, ilusión y nervios se quedó rondando en mi mente toda la noche.

Por la mañana, mi mamá me preguntó por él, y de repente sentí el pecho apretado, el corazón acelerado, y una ola de ansiedad que no entendía. ¿Cómo algo tan bonito puede hacerme sentir tan mal?

Y entendí algo: a veces la ansiedad no llega por lo malo, sino porque nuestro cuerpo no sabe todavía cómo sostener lo que siente. El amor, la ilusión, la expectativa… también pueden ser demasiado intensos.

Así que respiré. Me recordé que no tengo que tener todo bajo control, que sentir es parte de estar viva. Y que no pasa nada si a veces una emoción bonita también me desborda un poco.

💫 Y está bien. Sentir mucho también es parte de estar viva. Solo hay que respirar, bajar el ritmo y recordar: no todo lo que nos inquieta está mal…a veces es el corazón aprendiendo a abrirse otra vez. 💛

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